¿Messi está acabado? La respuesta siempre la da en el campo.
BARCELONA — Lionel Messi se ha convertido ya en motivo de discusión alrededor del Camp Nou. Y en silencio, callado y sin perder la compostura, el argentino sigue a la suya. Cuando terminó el partido frente al Dynamo Kiev se puso en el escenario su limitado acierto, que se sumaba al duelo frente al Alavés, y se recordó que ya atravesaba su peor racha goleadora más allá de los penaltis, creció el debate. ¿Mesi está en cuesta abajo?
Y Koeman decidió darle descanso ante el Real Betis, dejándole en el banquillo, en una decisión que fue tan entendida por unos como puesta en cuestión por otros. ¿Leo suplente? Así fue. Se sentó en la banda y asistió a una primera mitad poco menos que inexplicable porque el Barcelona, que llegó a rematar hasta en ocho ocasiones a portería, se marchó al descanso con un desolador 1-1 en el marcador.
¿La solución? Leo, por supuesto. Ansu Fati, lastimado en la parte final del primer tiempo, se quedó en el vestuario y Koeman dio entrada al capitán para que liderase el despertar. En un abrir y cerrar de ojos fue decisivo para explicar primero que el Barça recuperase la ventaja en el marcador y después para evitar un sufrimiento que dio paso a la goleada final.
“Es el mejor del mundo con mucha diferencia y siempre le queremos en el campo porque somos muchos mejores con él”, clamó Jordi Alba ante los micrófonos de Movistar al acabar el partido, en una frase que resume la opinión generalizada del vestuario azulgrana, donde la figura futbolística de Messi sigue siendo mayúscula. Sin discusión.
A ocho meses de acabar su contrato y a ocho semanas de que se abra un mercado de invierno en el que en primera persona podría dar a conocer su decisión de renovar o marcharse, Messi se sabe en el escenario. Y se sabe de una manera incómoda, leyendo, viendo y escuchando que su figura empezaba, empieza, a no ser intocable.
Camino de los 34 años, sin embargo, el liderazgo futbolístico del astro argentino en el Barça se mantiene inalterable. Y sabiendo que la rumorología no va a disminuir en las próximas semanas sigue a la suya. ¿Messi acabado? ¿Messi en la cuesta abajo? Messi, siempre, responde en el campo.